En Conserva

Necesito pedirte un favor. Necesito que me ayudes a abrir dos latas. No puedo comer. No anda. Te juro, necesito ayuda, no puedo sola... No anda el abrelatas.
Me quede adentro, no puedo salir, abri! abrime por favor! No puedo dejar de devorarme. Me enlate. El metal desde adentro encierra una oscuridad fria y chata. Desde aca no puedo abrir, no puedo cambiar la perspectiva. Vivo en aceite y agua, una intimidad de atun. Hace años que vivo en lata. Vivo en conserva. El conservadurismo inunda, desde las doctrinas añejas de mis padres hasta mis estructuras mas primarias, lo tiñe todo. Mi mundo se divide en frascos. Los recuerdos se traslucen a traves del vidrio. Distintos colores, olores, sabores. Yo conservo, guardo, junto, apilo, relleno, amarro, amontono, tapo.
Enlatada, me ubico de oferta en la gondola. Si es fin de semana paso a la pila del pasillo principal y me siento especial, me ubico de otra manera. Pero, como es habitual, pasan miles por el corredor y las manos van agarrando todo con una velocidad vertiginosa. Yo cierro los ojos con la esperanza que alguien me lleve, pido para adentro con fuerza para que nadie me escuche. Un dedo me roza y me da escalofrios. Una mano me alza y se arrepiente al instante. Ahi me quedo en el mismo lugar. Nadie me viene a buscar a mi. Sollozo mi soledad en silencio. Todos tenemos la misma etiqueta y a mi nadie me mira, nadie decide finalmente a quedarse conmigo. Es el tamaño de mi propia voracidad. Que verguenza. MI intimidad, ahi donde estoy mas desnuda que nunca. Tapate los ojos por favor. Soy topadora, quedate lejos que no te convengo. Alejen todo, no me puedo controlar. No te pongas en frente, te estoy adviertiendo desde ahora, despues no digas que no te avise. Cada lata abre su camino, hace su experiencia. Yo en cambio, no tengo suerte. No me apilo, no me acoplo, solo pido socorro, que me abran!